Cuando una pieza está siendo calentada, la energía utilizada solo será aplicada a determinada área, por la cual podemos decir que el calentamiento es localizado.
Siendo un proceso eléctrico, de un control extremadamente cerrado, es posible controlar la potencia y el tiempo de calentamiento. Hay tres categorías referentes a las ventajas que ofrece es calentamiento, los cuales se detallan a continuación:
- Incremento de la producción:
- El calentamiento localizado es rápido y el tiempo se reduce a segundos.
- Los equipos son compactos, facilitando el manejo de materiales en la línea de producción.
- Los cambios de modelo para las diferentes partes son fáciles y rápidos
- Mejora de los productos:
- El calentamiento y endurecimiento minimizan los problemas de distorsión.
- El rápido calentamiento reduce la formación de cascarilla (decarburación).
- Proporciona seguridad y control al área endurecida.
- La temperatura puede ser mantenida y controlada para cada pieza o lote y para todos los procesos y operaciones de producción primaria de metal como son endurecimiento, forjado, soldadura, recocido, normalizado y fusión.
- Bajos costos:
- Reduce las horas hombre porque tiene altas velocidades de producción
- No requiere destreza del operador.
- Minimizar los rechazos debidos a la distorsión.
- Normalmente reduce el costo por no utilizar materiales de alta aleación.
- Los costos de mantenimiento son disminuidos comparados con los calentamientos donde se utiliza combustible.
- El desecho es mínimo debido al control que se tiene en su calentamiento y enfriamiento.
Este proceso se utiliza en aquellos métodos industriales que requieren alta repetibilidad en las propiedades metalúrgicas de las piezas, la máquina se ajusta una vez y esto es motivo para que el proceso sea confiable, siendo posible la automatización, donde las piezas son cargadas y descargadas mecánicamente sin la presencia de un operador.
Una de las desventajas que podemos mencionar es que para cada pieza a templar se requiere una bobina de diseño especial.
El calentamiento por inducción es frecuentemente uno de los más efectivos procesos térmicos disponibles para una gran variedad de aplicaciones que incluyen:
- Endurecimiento superficial.
- Endurecimiento total para forjado.
- Relevado de esfuerzos.
- Recocido y normalizado.
- Soldadura por brazing y soldering.
- Fusión.
- Sellado.
- Inducción por plasma.
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